Hoy volvemos a hablar del sol…
La exposición solar degrada la matriz dérmica como el colágeno y la elastina, esos daños dérmicos dan lugar a la formación de arrugas.
Para plantar cara a ese envejecimiento fotoinducido, debemos trabajar con productos enriquecidos con activos antioxidantes, para reestructurar el tejido y frenar dicho envejecimiento.
Imagen: Wikipedia